¿Qué debes saber antes de solicitar un crédito?
Solicitar un crédito podría significar la realización de alguna meta o sueño que nos hemos trazado, ya sea empezar un negocio, pagar la maestría o adquirir una vivienda. Por eso es muy importante considerar distintos aspectos antes de solicitarlo. Aquí te explicamos de forma sencilla todo lo que debes saber antes de pedir un crédito.
¿Crédito y préstamo?
En este punto es importante diferenciar los créditos de los préstamos, porque mientras del primero puedes disponer una parte del dinero -pagando solo los intereses del dinero utilizado-, en el préstamo pagas intereses por toda la cantidad de dinero que te prestan, ya sea que utilices o no el dinero.
¿En qué consiste un crédito?
Un crédito es una cantidad de dinero limitada que una entidad financiera pone a disposición de un cliente durante un período de tiempo concreto. Este puede no recibir la cantidad de golpe, sino que la puede usar paulatinamente mediante una cuenta bancaria o una tarjeta de crédito, para ir así administrándolo según las necesidades de cada momento.
Un crédito no es una fuente ilimitada de ingreso adicional, pues el cliente, por su parte, se compromete a pagar el monto otorgado, más el interés correspondiente y otros gastos en los que se pueda incurrir, por ejemplo, el coste de una anualidad en el caso de las tarjetas de crédito. Los créditos se conceden durante un plazo de tiempo específico, y su propósito es cubrir gastos corrientes o extraordinarios en periodos determinados.
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de elegir un crédito?
Antes de solicitar un crédito, sin importar del tipo que sea, tenemos que presentar atención a las siguientes cuestiones:
Tipo de interés
Es el dinero extra que tenemos que pagar al banco por el crédito que nos ha concedido. El tipo de interés, por lo general, se expresa en forma de porcentaje. Existen diferentes tipos de interés (fijo, variable o mixto).
Comisiones
Al solicitar el crédito, el banco nos puede solicitar el pago de una serie de comisiones (apertura, gestión…). Estos gastos asociados a la concesión del crédito suelen estar expresados en forma de porcentaje.
Cuota mensual
Al pedir un crédito tendremos que hacer frente al pago de unas cuotas mensuales. Las cuotas son, por tanto, la cantidad que tenemos que abonar cada mes e incluyen el interés y la parte proporcional de la cantidad utilizada del total del crédito.
Capital
Es la cantidad máxima de dinero que la entidad financiera pone a nuestra disposición cuando solicitamos un crédito bancario.
Vencimiento
Este concepto hace referencia a la fecha límite a partir de la cual ya no se puede disponer del crédito que nos ha sido concedido.
Tipos de crédito
Los bancos suelen tener varios tipos de crédito que abarcan los requerimientos y necesidades de los clientes, ya sea en plazos de pago como el destino que le quieren dar a sus créditos.
Crédito hipotecario
Es un crédito que se otorga para la adquisición de una propiedad ya construida, un terreno, como también para la construcción de viviendas, oficinas, etc. Son créditos de largo plazo y su destino es específico (compra de inmueble).
Crédito comercial
Orientado a la actividad productiva de las empresas para la compra de materias primas, de mercancía, maquinaria, entre otros. Suelen ser de largo plazo y su destino específico (actividad productiva).
Tarjetas de crédito
Fuente de financiamiento de las personas que permite la compra de bienes y servicios sin la necesidad de disponer de dinero efectivo en el momento con el compromiso de pagar más adelante con los intereses agregados. De plazo corto y destino de libre elección.
Créditos específicos
Muchos bancos suelen dar créditos específicos como los créditos educativos o vehiculares, que tienen como ventaja que sus montos y planes de pago están diseñados de acuerdo a dichos objetivos.
Crédito personal
Se trata de los préstamos personales, los cuales son abiertos, de libre disponibilidad y suelen ser de plazos cortos y medianos.
Solicitar un crédito es algo que puede facilitar mucho la vida, pero analiza si te encuentras en el momento adecuado para pedirlo. Por ello, es conveniente pedir dinero prestado cuando se trata de realizar una inversión, por ejemplo, para destinar más recursos a la educación de nuestros hijos, pagarnos los estudios o comprar algún departamento.